Las imágenes que vais a ver hoy, pertenecen a uno de mis últimos proyectos. En este caso vamos conocer una casa en la que su único habitante es un chico, por lo que hoy sí veremos un caso real de interiorismo con estilo masculino. La verdad es que en esta casa hay una historia muy peculiar, además de que fue un cliente excepcional porque tengo que decir una cosa; siempre que un proyecto ofrece un resultado especial, es porque el cliente que hay detrás se ha dejado asesorar, ha colaborado y por supuesto, tiene buen gusto. Cuando quieren aprender a tener su casa bonita y se implican, el éxito está asegurado.
Omar, que así se llama su propietario, contactó conmigo porque acababan de entregarle su apartamento. Estaba nuevo de obra y todavía no no había comprado nada. Tenía muy claro que quería una casa bonita, diferente, y eso a él se le iba de las manos. En la primera visita a la vivienda fui a medir y a fotografiar el dormitorio principal y el salón que es lo que necesitaba para entrar a vivir. El apartamento tenía tres dormitorios, y ahora os explico porque digo tenía, es muy luminoso y los acabados ya eran bonitos.
Una vez en la casa, después de verlo todo y cuando estaba ya a punto de irme le «solté» a Omar: (le solté porque yo funciono bastante así, sin pensar), ¿has pensado en abrir la cocina al salón? Evidentemente contestó que no porque de haber sido así seguro me lo hubiera comentado. El caso es que el recibidor se quedaba oscuro, la cocina era amplia y luminosa pero por el estilo de vida que él tiene, lo vi muy claro. Le expliqué cómo lo haría y me contestó: ya «si eso» más adelante, cuando tenga el dormitorio y el salón.
Aquí el estado original del recibidor con la cocina a la derecha y un dormitorio pequeñito a la izquierda.
Hasta ahí todo perfecto pero os tengo que decir que antes de llegar a mi casa recibí una llamada suya diciéndome que íbamos para adelante con todo. Me llevé una sorpresa increíble porque sabía que no se iba a arrepentir. Me volví para medir lo que necesitaba y así empezó todo. En las siguientes imágenes podéis ver cómo quedó el resultado de abrir la cocina. En este caso y como la casa es para él solo, se sacrificó el armario del recibidor y un dormitorio muy pequeño que se lo dimos al que ha quedado para invitados y al dormitorio principal. Con solo mover dos tabiques ya veréis el resultado.
Omar tenía algunas cosas muy muy claras, y lo mejor de todo es que a pesar de tener las ideas tan claras, se dejó aconsejar absolutamente y así fue como consiguió tener en su casa todo lo que pedía. Para empezar quería algunas paredes de piedra y de madera en algún lugar de la casa, por lo que en el salón revestimos la de la zona de estar de piedra y la pared que enmarca la zona de comer de madera. En la pared de la cocina que da a la península también se puso madera. La segunda premisa completamente inamovible fue el color predominante que había elegido para su casa. Os tengo que decir que por mí encantada de que le gustara tanto el negro porque la elegancia estaba asegurada.
Así fue como el color negro se deja ver por toda la casa. En la cocina cambiamos los tiradores, el zócalo inferior y los electrodomésticos se eligieron de ese color. Para la península también conseguimos el mismo material que tienen los muebles pero en negro y también la misma encimera de granito. La verdad es que tuvimos mucha suerte y el resultado ha sido como si estuviera así desde el principio. Ahora cuando entra en la casa tiene el mueble recibidor justo enfrente y el resto del espacio amplio, luminoso y diáfano.
Finalmente tenemos el dormitorio principal. En esta zona, Omar quería algo diferente y después de haber tirado algunos tabiques para abrir la cocina, su dormitorio quedaba con unas dimensiones de escándalo por lo que podíamos hacer algo muy especial. No sé porqué pero no quería para él el típico cabecero con la pared blanca, empapelada o pintada. Para ello nos fuimos a ver materiales a Porcelanosa y de allí salimos con el acabado con el que revestí la pared. Las dimensiones eran enormes y había que darle calidez al dormitorio así es que diseñé la estructura que enmarca la pared del cabecero y se forró con madera muy oscura para seguir con la línea de color que él quería. También la aprovechamos para darle un toque de luz indirecta a la estancia.
A los pies de la cama situé una rincón de trabajo para que pudiera estar cómodamente con su ordenador, un sillón con iluminación para leer y en el otro extremo, como vais a ver en las imágenes, está el vestidor y su baño. El dormitorio siempre nos ha recordado a las habitaciones de los hoteles por sus dimensiones y por la diferentes zonas que encontramos en él. Sin duda un trabajo del que estoy muy contenta pero termino como empecé el post: esto sin la colaboración del cliente, nunca hubiera sido posible.
Espero que os guste.
Excelente trabajo, me encantó… Simplicidad y espacios bien definidos.
Gracias!
Holaaaa, me ha encantado. De donde es la lampara redonda y la colcha calada del dormitorio ?
Gracias
Hola! muchas gracias.
La colcha era de la propiedad y la lámpara la vendemos en el estudio.
Un abrazo.