El soufflé es uno de esos postres, en el caso de que sea dulce, a los que acompañanan algunos dichos, pero el que me gusta para él es el que dice: «los invitados esperan al soufflé pero el soufflé no espera a nadie». Si alguna vez habéis tenido la ocasión de comer soufflé y sobre todo si lo habéis preparado, seguro os ha llamado la atención lo rápido que pierde su esplendor. Para el que lo cocina ve su gozo en un pozo porque en cuanto empieza a perder temperatura, se arruga. Os voy a contar cómo hago mi soufflé de dulce de leche y los truquillos que sigo para que aguante un poquito más con el aspecto de recién sacado del horno.
El soufflé se puede hacer dulce o salado, es para comer calentito y resultan ser unos bocaditos deliciosos. Normalmente son muy sencillos de elaborar y eso si, cuando vayan a salir del horno todo el mundo tiene que estar en la mesa. Después de hacerlo varias veces poco a poco he ido incorporando a las recetas algunos pasos para que duren más tiempo tan bonitos. La base del soufflé son las claras de huevo a punto de nieve y para que no bajen nada más sacarlos del horno le podemos añadir a la mezcla un poco de Maizena. Nada de abrir el horno antes de 15 minutos para que el cambio de temperatura no lo estrepee todo y engrasar bien los moldes para facilitarles que suban, son algunas de las cosas que tengo en cuenta para que aguanten más tiempo.
El otro día me llego en la caja de Degustabox que recibo todos los meses, un botecito de dulde de leche Márdel. Nunca había probado esta marca pero nada más ver el bote me recordó a los soufflés que hago con este dulce y aquí os dejo la receta para que los hagáis vosotros también. Por cierto, si alguien quiere probar a recibir la caja de Degustabox en casa, os dejo este código ZKH6G para que la primera os salga sólo por 9,99€. Los siguientes meses os llegará por 14,99€ gastos de envío incluidos y con un surtido de artículos para conocer que a menudo sorprenden.
Ingredientes para 10 vasitos:
– 250gr de dulce de leche Márdel
– 6 huevos
– 3 cucharadas de azúcar
– 50gr de Maizena
– mantequilla para engrasar
– una pizca de sal
Preparación:
Precalentamos el horno a 200º y engrasamos los moldes con mantequilla o con grasa en spray. Yo la utilizo mucho porque es muy cómoda de aplicar. Normalmente para el soufflé se utilizan moldes altos y con la base pequeña para que suban. Separamos las claras de las yemas. Mezclamos las yemas con el azúcar hasta conseguir una crema clara. Incorporamos a esta mezcla el dulce de leche y lo integramos bien. Batimos las claras a punto de nieve con una pizca de sal, esto hará que suban y se queden más duras. Una vez las tengamos a punto de nieve le añadimos poco a poco la Maizena y la mezclamos con cuidado y movimientos suaves y envolventes. Después se mezclan los dos preparados y ya está preparada la masa para rellenar los cuencos. Es aconsejable llenar 3/4 partes del bol porque luego crecen. Si los llenáis más, corréis el riesgo de que se derramen en el horno. Por último, se introducen en el horno durante 15 minutos. No abrirlo durante este tiempo porque el cambio de temperatura haría que se quedaran como están y no subieran más.
Así de rápido y así fácil. En 30 minutos tendréis un postre listo riquísimo.
Os aseguro que esta receta la vais a tener en cuenta porque cuando la prueben, os la van a pedir más de una vez.
