Tenerlo claro, es una de las cosas más importantes antes de comenzar una reforma. Es posible que no se conozca a ciencia cierta lo que queremos pero seguro que algún aspecto de la vivienda va con nosotros de lleno y eso lo queremos mantener a toda costa antes de comenzar. Al parecer eso es lo que le pasó a la pareja italiana dueña de esta casa de campo italiana. Para ellos vivir entre muros de piedra era su prioridad. Fue así como el estudio de arquitectura que se encargó de la reforma sabía que era lo primero que iban a mantener.
Al parecer lo que ahora es una preciosa vivienda, en el siglo XVII era un molino de aceite. La pareja quería seguir con el espacio original todo lo que fuera posible. No quisieron añadir nuevo muros para que los espacios quedaran abiertos pero aún así, faltaba luz. La funcionalidad original del edifico no necesitaba demasiadas ventanas y ahora tenían que darle solución a este tema. La mejor opción fue llenar las bóvedas de claraboyas y así sí; un resultado espectacular. Me fascina la historia del edificio, la conservación del mismo y principalmente el magnífico trabajo han hecho para que haya terminado así.
No todos los mortales pueden tener un molino de aceite a su disposición pero el nuevo aspecto renovado y minimalista de la vivienda, se puede llevar a donde uno quiera. Si no se ve el resultado del trabajo se podría pensar que iba a quedar frío por el hecho de ser todo el edificio de piedra y tener esas bóvedas tan altas, pero no. Los muebles y complementos se han elegido con un gusto exquisito para que tenga la calidez y funcionalidad de cualquier casa. Vamos, que es un trabajo redondo y una casa preciosa. Os invito a verla con tranquilidad porque lo merece.
Increíble como resaltan los tonos neutros con la piedra. Muy luminosa y espaciosa esta bella casa de campo.
Neutra, luminosa, carismática, perfecta !!!! Me he quedado loca con ella. Que maravilla poder habitar en un lugar así.
La verdad es que es una pasada!!!
Un besado corazón!!!