Siempre que se presentan fines de semana grises y lluviosos se me viene a la cabeza lo agradable que es poder estar en una casa en la montaña frente a una gran chimenea. Estar en plena naturaleza recarga las pilas como no hay otra cosa igual y estar lejos de la ciudad le viene bien a todo el mundo, aunque sólo sea por un par de días. De todas formas creo que ya sabéis lo que me gustan las casas de campo, los muros de piedra y esos ambientes en ocasiones tan bucólicos que nos dejan disfrutar.
La casa que vais a ver hoy, aunque no lo parezca, está en el sur de Suecia. Es una vieja mansión del año 1800 que tras su reforma se ha quedado así de impresionante. Una preciosa combinación de actualidad y tradición con la que han conseguido un espacio totalmente renovado en lo que antes fue una granja. Lo cierto es que imaginarse sentado en el sofá enfrente de esa inmensa chimenea… en fin. El que tenga algo así o parecido para salir corriendo un viernes al terminar de trabajar, es muy afortunado. El resto seguiremos admirando estas casas tan bonitas por si algún día nos toca la lotería.
Lo cierto es que aunque algunas casas nos hagan soñar un ratito, lo que nos importa por aquí es su decoración o su estilo. Lo que vemos cada día nos tiene que servir para recrearnos un ratito y por supuesto ayudarnos, en el caso de que vaya con nosotros, y podamos adaptar a la decoración de nuestros hogares. Así es que espero os guste, que os sirva de inspiración y si tenéis la suerte de escaparos este fin de semana, que disfrutéis mucho aunque tengamos que llevar el paraguas a todas partes. No pasa nada, que la lluvia también tiene su encanto.
♥ Feliz Finde ♥