Días de verano en La Toscana

Hay lugares que nada más saber que existen y pensar en ellos unos segundos te llenan de energía. Lo malo es cuando te das cuenta que tu estado real es estar sentado delante de un ordenador. Ahí es cuando la cosa cambia. Siempre hay demasiadas cosas que hacer. Muchas veces no sabemos ni por dónde empezar y otras dan ganas de salir corriendo. Sí, pero salir corriendo de verdad. Si hoy me preguntan a qué lugar me gustaría salir corriendo, pediría sin dudarlo unos días de verano en La Toscana. Luz mediterránea, campo y buen vino. Si las imágenes que nos presentan de esta zona italiana no fueran tan idílicas…

La verdad es que tanto las casas como los campos se prestan como pocos lugares a ser fotografiados en cualquier estación. Hay miles de fotografías tomadas con la luz de los amaneceres de La Toscana. Las terrazas bajo las parras convierten cada atardecer como el momento más bonito del día. Vamos, que metía dos cosas en un maleta, la cámara de fotos y ponía rumbo a una casa como la que vais a ver hoy. Para empezar, fijaos en su situación. Está sola en medio de un increíble paraje.

Otra casa de vacaciones perfectamente habilitada tras su reforma. Una rehabilitación que no ha permitido que esta increíble mansión pierda nada de su encanto. Cuenta su propietario que ha viajado con su camioneta por toda Francia e Inglaterra para comparar los muebles. Recogen sus limones, cuidan del huerto, de los olivos y de los campos de lavanda. En la preciosidad de cocina que vais a ver realizan cursos de cocina. También ofrecen clases de yoga y es que el entorno no puede invitar más a la relajación. Resumiendo: algo así me parece un espectáculo para tomarse unas vacaciones de verdad, para dejarse cuidar.

Días de verano en La Toscana

Vía