Darle una vuelta al clásico

Hoy vais a ver en esta casa un claro ejemplo de cómo darle una vuelta al clásico. En muchas ocasiones la decoración por la que optamos hace unos años era lo que tenemos por estilo clásico. Con el tiempo nos hemos cansado de ella y nos apetece darle una vueltecita para actualizar la decoración de los ambientes. ¡Ah!, y hay muchos casos en los no hace falta deshacerse de todos esos muebles que en su día nos costaron un pastizal.

Con un poquito de imaginación y quizás tomando algunas ideas de aquí y de allí podéis tener la solución. Muchas veces un cambio de cojines en el sofá hacen que nuestro salón rejuvenezca. Otra buena solución es quitar muebles que nos nos sirvan y despejar el espacio para darle amplitud al salón, dormitorio e incluso la cocina. Un buen sistema para almacenar y evitar que las cosas estén a la vista es otra buena solución.

Fijaos en el detalle del banco que hay a los pies de la cama. Si nos paramos a pensar es para decir: si no pega con el cabecero o las lámparas. Pues fijaos que una vez que está puesto queda genial, y le da un toque al dormitorio que lo actualiza por completo.

Por otra parte si sois de los que últimamente estamos locos con las paredes de ladrillo, mirar que bien queda la pared de detrás del cabecero con el tapizado o las lámparas más clásicas. Todo queda bien o mal en función del toque que le demos cada uno. Pensad en lo que os gusta, con lo que os identificáis y no tengáis miedo de cambiar, sustituir, pintar o incluso tirar si es necesario. Es bonito, emocionante y muy motivador, cambiar la decoración de la casa cada poco. No hace falta que sea en su totalidad pero los pequeños cambios hacen mucho. ¿Lo habéis pensado?

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