Antes y después en un dormitorio nórdico

Llevo desde que empezó el verano planificando y ejecutando cambios en casa. Es un auténtico follón pero tan gratificante que cuando lo das por terminado no te arrepientes para nada. He cambiado pintura, decoración y textiles de un dormitorio. La cocina la he convertido en un paraiso (por lo menos para mi), ahora está toda blanquita y acompañada por mucha madera. Qué ganas tenía de tener una cocina así.

Está claro que hay que tener tiempo para meterse en este tipo de cosas, buenas ideas y algo de pasta. Cada día vemos como se consiguen grandes cambios con pequeñas inversiones y es que eso es lo más agradable de todo. Soy de las que piensan que si eres joven es más que seguro que cambies en más de una ocasión de casa y hasta tu cambiarás según las circunstancias de la vida en ese momento. Por eso pienso, que una buena opción decorativamente hablando es no invetir demasiado para que en un tiempo cuando apetezca volver a darle otro aire a la casa no duela. Después llega uno a una edad en la que las cosas pueden estar más claras, estar más acomodado y es entonces cuando te puedes permitir definir más es estilo de tu casa.

En el caso de hoy vamos a ver el fabuloso «antes y después» de un dormitorio. El cambio es espectacular con un poco de lo que os decía antes, pintura, ingenio y algo de pasta. No hay gran inversión en mobiliario es más, muchos muebles son reusados. No hay armario, ahora si, la idea es espectacular. Los percheros son unos sencillos burros y el altillo unas simples escuadras con unos tablones de madera.

De verdad, si todavía no sabéis como adecentar esa habitación que dais por perdida, por favor tomad nota porque el cambio es asombroso y lleno, llenísimo de estilo nórdico.

 

 

Ya sabéis que si necesitáis ayuda para realizar ese cambio en vuestra casa o negocio, decoración o reforma, podéis contar conmigo. Dejad vuestro mensaje aquí y cuando vuelva de vacaciones hablamos. Como siempre, os ayudaré encantada.

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