Siempre que veo una casa en la que los rasgos de su arquitectura están a la vista, pues como que me llama la atención. Es fascinante el juego de volúmenes y contrastes que producen en una vivienda y si nos detenemos por un momento a pensar en estas cualidades que tienen algunas viviendas, podemos tomar la decisión de darle el protagonismo que merece y vestirla con una decoración más sútil. Cualquier vivienda puede tener una arquitectura acogedora y eso hay que explotarlo. En esta que os dejo aquí hoy, pasa algo así y me encanta. Lo primero que llama la altención y mucho, es el techo. Todas esas vigas vistas y los colores con los que las han pintado, le da ese carácter de ligereza que también aportan otras piezas de diseño.
Por otro lado la gama de colores de los muebles, sigue suavizando todo el espacio y combina perfectamente con algunos toques de color que se pueden ver por el resto de la casa. Vestida con blancos, grises y cobres que ya sabemos lo bien que funcionan juntos; pero decidme que todo el conjunto no es de lo más cálido y relajante. Esto es importante porque cuando nos encontramos con espacios tan abiertos, a muchos les da un poco de miedo no encontrarse del todo cómodos al no estar estos muy definidos. No quieren rodearse de un espacio frío, sin calidez.
Ya veis que no tiene porqué ser así ya que en función de los colores, los materiales, etc. vamos a determinar que el espacio nos envuelva. Independientemente de esto, estará nuestra decoración, que optemos por el estilo que optemos y si no recargarmos el ambiente, una combinación de mobiliario sencilla, nos dará el toque ganador. Los más atrevidos los tienen claro y al que le cuesta decidirse, después no se arrepiente.
¡Espectacular! Muy espacioso y con un estilo muy personal y acogedor.