Una casa de vacaciones

En muchas casas ya se han empezado a calentar motores para salir corriendo de la ciudad a pasar los días de Semana Santa en algún destino tranquilo. Particularmente se me ha hecho corta la espera de estas vacaciones porque aquí en Valencia acabamos de pasar los días de Fallas. Cuando me enteré que ya teníamos días libres otra vez, pues para que os voy a engañar, a nadie le amarga un dulce. Lo malo de esto es que uno se acostumbra rápido a lo bueno y luego cuesta coger la marcha otra vez. La suerte de algunos, es que tienen como destino una casa de vacaciones propia y esto si que es ideal porque no tienes que calentarte la cabeza preparando el viaje, se hace la maleta y ya está.

Así es que hoy nos vamos a deleitar contemplando una casa restaurada en Mallorca. Si os fijáis tanto la arquitectura como el tratamiento decorativo de los muros y suelos, tiene algo particular en esta zona. Es común en este tipo de casas dejar en suelos, escaleras o paredes dejar la piedra a la vista. La madera tampoco puede faltar y siempre nos encontramos con alguna viga o puerta reciclada que acompañadas por el hierro dejan un estilo rústico con aire contemporáneo.

Esta villa tiene otra cosa que me encanta y son los muebles realizados de obra. En este caso en concreto son de líneas sinuosas que le aportan más carácter rústico. Baldas u ornacinas para guardar el menaje, los utensilios de cocina o del baño. Así todo queda a la vista, todo queda a mano pero resultar muy decorativo.

Si a todo esto le sumamos los alrededores que se perciben a través de los cristales del porche, para qué queremos más. Es ideal por dentro y por fuera, auqnue nosotros nos tenemos que conformar con mirarla. Ahora a descansar y a preparar las vacaciones.

♥ Feliz Finde ♥

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