Hay dos cosas en las que no puedo evitar fijarme cuando entro a una casa. Os diré mucho más incluso que en la decoración. Una de ellas es el orden y la otra el olor. Da igual si la casa o su decoración es más o menos bonita, o si está a la última o no, pero ver una casa desordenada o sin ventilar y olor a comida creo que es de las cosas que invitan al calor de hogar a salir por la puerta grande. La aromaterapia en el hogar por lo menos ayuda a que el aire se pueda respirar y os voy a contar cómo.
Llevo más de veinte años, con inciensos, velas aromáticas y quemadores de esencias. Estos últimos me encantan. Puedes cambiar el aroma simplemente con cambiar de esencia y siempre tienes una vela encendida. No echan humo y si el aceite esencial es de buena calidad aportan muchísimos beneficios. La única pega que le encuadro a los quemadores es que normalmente el cuenco es demasiado pequeño y cómo te olvides de rellenar el agua, la esencia empieza a quemarse y salpicar. A mí ya me han hecho un desastre en algún mueble.
Por suerte tenemos los difusores eléctricos para esencias en frío que son una auténtica comodidad. Hace unas semanas me llegó este de Lilien recomendado por Pranarôm cuyo diseño ya me entró por el ojo porque queda bien en cualquier sitio, pero cuando conocí sus funciones y prestaciones… no hay un día que no se encienda en casa.
Hay dos tipos de difusores: en seco y de ultrasonidos. La elección entre uno y otro va en función de para qué lo necesitemos. En mi caso es ultrasónico y lo que consigo con él es aportar la humedad que ahora en invierno resta la calefacción. En un recipiente interno y muy amplio se mezcla el agua con el aceite esencial y lo propulsa al exterior en forma de bruma como podéis ver en alguna imagen.
Éste modelo en concreto es para estancias de más de 100m2. Ló elegí así porque en mi casa los techos son muy altos y el salón se comunica con la parte superior y de esta forma, me aseguraba que la esencia llegara a todos los sitios. Tengo que decir que funciona porque los primeros días me preguntaban que por qué olía a limón toda la casa. No había otro secreto más que el aroma de mi esencia para el difusor: Eucalipto, Naranja dulce y Palo de Ho.
Además de que me encanta su diseño y por su puesto su función, lleva un mando a distancia que lo hace súper práctico. Te deja programarlo para que se apague en el tiempo que elijas. Le puedes añadir la luz dentro de una gama cromática con la que obtener el equilibrio cuerpo mente. Y por último, si quieres le puedes conectar la música oriental ancestral a la que se le regula el volumen.
Seguro que ahora entendéis por qué me gusta tanto. Son muchos los beneficios que podemos encontrar en los difusores eléctricos de aceites pero quizás loa más importante a señalar, son los múltiples beneficios que nos aportan los aceites esenciales. Gracias a estos difusores tenéis una forma muy limpia y cómoda de disfrutar de ellos. Tanto si tenéis algún tipo de afección respiratoria como si no, os animo a pasar por la web de Pranarôm para descubrir todo lo que os pueden ofrecer.
Como siempre, espero que os sirva de ayuda para que podáis mejorar el confort que buscamos en una casa y sobre todo, de la forma más natural posible.
¿Qué precio aproximado tiene?En la web del enlace tampoco dice…Muchas gracias de antemano.
Hola Yada, este modelo eran unos 120€ porque es el que cubre más m2. Los hay con otras características y puedes buscar en la web el punto de venta que tengas más cercano e ir a verlos todos.
Bss.